Sentada sobre el musgo y las rocas contemplaba su rostro, que se inquietaba incesantemente a causa de la corriente. Sus ojos se mimetizaron con el fiel reflejo que le ofrecian las aguas de aquél rio. Con el pasar de las noches se hizo amiga de él, y compartieron recuerdos,vivencias lejanas, momentos falsos, sueños... lagrimas y risas.
En aquellas aguas se reflejaba su mundo(el verdadero) no aquél de arboles que podian tocarse , ni de cabañas cálidas y siestas junto al fuego. Allí en el rio todo era difuso, nada dejaba verse en su verdadera forma, pero a ella le gustaba y sentía que sólo en esas aguas podía encontrarse.
En ese rio era reina de su mundo, de su voluntad y de su razón. Aquél servía para recordar los tiempos en que estaba junto a él, nadando en lo más profundo, un universo que compartian sin saberlo. El rio fue la respuesta a sus preguntas, su companía en la soledad, el fuego de su pasión, el recuerdo más vivo de él. El mundo anterior del que fue dueña ya no estaba, sin embargo, el rio era testigo y representación de su pasado.
Allí dejo su rostro y su figura , inalienable ahora de aquellas aguas. Allí dejo una parte suya , que ninguna brisa y tempestad alguna vez podrá borrar; allí dejo su rostro. Y cuando él fue a buscarla esperanzado, se dió cuenta de que todo se había perdido ...sólo encontró el agua que corria desesperada por las orillas. Y descubrió que el aura de aquella joven seguia allí, no su cuerpo .Y supo que solamente aquello quedaría : un rio que la reflejará hasta la eternidad , rio en el que él no pudo verse.
Se dice que aquél hombre pudo encontrar algo similar a ese rio, se dice que fueron las hojas en las que escribió... en cada una de estas palabras su rostro se me aparece.

Santi